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De pizarrones y pizarras

Por María Izaguirre

En estos últimos años, uno de los elementos que se ha utilizado muchísimo en el diseño interior es la pintura de pizarrón negro de escuela para crear pizarras en todas partes. Y es que el pizarrón puede ser muy funcional. Sirve para escribir lo que sea, y es un modo de comunicar y desatar un poco nuestra creatividad.

La pintura de pizarra es un material al que podemos sacarle muchísimo partido en decoración; es novedoso, versátil, económico y accesible.

Cada vez es más conocido y más fácil de conseguir por ser una constante en cualquier línea de decoración. Las pinturas de pizarra son también una opción estupenda para renovar los diseños de nuestros interiores, se tarda pocos minutos en aplicar y suele mantener su aspecto estético.

En mi columna de hoy te invito a que hagamos un recorrido por sus usos en las diferentes áreas de la casa y a que veamos sus posibilidades tanto en decoración como en utilidad:

En el cuarto de los niños es un elemento básico para ayudarles a desarrollar su creatividad, sin necesidad de dañar nuestras paredes. En el cuarto de Maya tengo todo un muro de pizarrón y ella pasa horas pintando, dibujando, aprendiendo letras, utilizando gises de colores. Aparte al ser color negro, le ayuda a identificar que solo las paredes negras se pueden pintar, así mis otras paredes están seguras.

Otro lugar donde yo tengo esta pintura es en la cocina. La utilizo en un muro para poner la lista del súper, recados, pendientes para la señora que me ayuda con la limpieza y frases que me inspiran ese día. También tengo pequeños letreros en las canastas de las verduras para identificarlas y tener más organizado el espacio.

En el estudio u oficina es indispensable para mí este tipo pared, ya que me ayuda a organizar mi día, anoto las ideas, los pendientes, dibujo mi calendario y siempre utilizo gises de diferentes colores para identificar parte importante de las notas, además esto le da un aspecto más artístico y colorido.

Dales personalidad a tus espacios añadiéndoles elementos que contribuyan a tener un look más original. Quizá algunos imanes puedan servirte para jugar un poco con el estilo de la pizarra. Algo más drástico también podrían ser los viniles recortados.

También se puede utilizar este tipo de pintura en detalles más pequeños. Por ejemplo, en las macetas y con el gis le puedes poner el tipo de planta que es, esto ayuda mucho si tienes plantas aromáticas como tomillo, albahaca, menta, así podrás identificar qué tipo de planta utilizarás a la hora de cocinar.

Nunca tengas limpias tus pizarras. Siempre asegúrate de que tengan contenido. Ya sean notas importantes, chistes, dibujos, graffitti. Ese pizarrón está hecho para usarse y debe mantenerse lleno siempre.

Maria Izaguirre: Arquitecta, decoradora y mamá. Ha trabajado en el diseño y construcción de casas habitación y locales comerciales, bajo la idea de crear espacios armónicos e integrados a la naturaleza. Sus últimos proyectos han sido sobre museografía, diseño y construcción de albergues de reproducción para animales silvestres.
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