X

¡Bebés al piso!

Por Kim Dewey

Mi hija nunca uso ningún tipo de andador, baby-walker, columpio ni nada parecido. No fue una decisión consciente, simplemente nunca se me ocurrió. Fue bebé de piso y de brazos, pero después de que varias mamás me preguntaran sobre el tema, hice una pequeña investigación, que además que resonó mucho con mi intuición y forma de crianza, me pareció super interesante compartir, ya que en México es todavía muy común que los bebés usen andadores, aun cuando su uso ha sido muy cuestionado por razones de seguridad y es incluso en algunos países considerado un producto del pasado.

Esto fue lo que descubrí:

  • El origen del andador se relaciona con la creación de un elemento rehabilitador para personas adultas con dificultades de locomoción, y no con su utilización actual, ligada a la iniciación de la marcha en los infantes.
  • Los andadores, al contrario de la creencia popular no ayudan al bebé a caminar y su uso puede retrasar el desarrollo motor y mental pues limitan la oportunidad de que el bebé fortalezca, aprenda y desarrolle habilidades como el equilibrio y coordinación necesarias para desplazarse por si mismo,
  • El uso de andador puede retrasar el gateo o no dar suficiente tiempo al bebé para perfeccionarlo. El gateo por su parte conecta los hemisferios cerebrales y crea rutas de información cruciales para la maduración de las diferentes funciones cognitivas, desarrolla el sistema propioceptivo, y se tonifican adecuadamente los músculos que más adelante permitirán que el bebé se ponga de pie y camine.
  • En el andador el bebé se desliza sin mucho esfuerzo apenas tocando con la punta de los pies el suelo, lo que no le permite sentir sus pies ni su propio peso.  Energéticamente pierde conexión con la tierra y el sentido de enraizamiento y sostén.
  • En el andador el bebé no puede ver sus pies, lo que también crea una desconexión entre la relación de su cuerpo, sus movimientos, el espacio y la acción de desplazarse.
  • El andador permite al bebé una mayor movilidad y más velocidad de movimiento de la que naturalmente es capaz, por lo que puede ser más propenso a accidentes. Lo ideal es que el bebé conozca y aprenda del mundo que lo rodea gradualmente, que vaya descubriendo sus capacidades y avances a su propio ritmo.
  • La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor (EUA) declaró que los andadores causan más accidentes que cualquier otro producto para bebés. La APP (American Academy of Pediatrics, EUA) ha tratado de prohibirlos desde 1995 y en Canadá su venta fue prohibida en 2004.

 

Desde mi experiencia, lo bebés necesitan mucho menos de lo que pensamos, la mayoría de las veces lo más sencillo y simple es lo mejor. En este caso, dejarlos moverse libremente, aprender a su ritmo, estar en contacto con la tierra y ensuciarse pasando más tiempo en el suelo tiene muchos más beneficios que cualquier andador moderno o sofisticado.

 

Kim Dewey: Mamá, yoguini, diseñadora y viajera de corazón. Criando despacio. Lo que me inspira: mi familia, la naturaleza, la magia de lo cotidiano.
Related Post