Quizá fue a mitad de la noche, en la fila del super o mientras cambiaba el semáforo, quizá fue en la sala de espera de un hospital o encerrada en el baño, quizá mientras caminabas por la calle o cuando mirabas a un bebé (el tuyo) que no dejaba de llorar, quizá fue sin nadie a tu alrededor o rodeada de gente. No importa el lugar ni la historia personal, todas, en algún momento desde que nos convertimos en madres, nos hemos sentido solas. Quizá porque la maternidad no fue lo que imaginamos (aunque nunca es lo que imaginamos), quizá porque nos contaron una historia diferente o porque sentimos que nadie podía entender lo que estábamos viviendo.
Tal vez tú no te diste cuenta, pero en otra habitación la luz también estaba encendida, alguien buscaba en internet las mismas respuestas a tus angustias y en la sala contigua del hospital otra mujer cerraba los ojos y contenía las lágrimas. Tal vez no te diste cuenta pero no estabas sola, No Estás Sola. NES existe a partir de hoy para decírtelo en cada página.
Alejandra Peart