Aunque en México se observa un avance en las oportunidades para las mujeres, aún falta un largo trecho por recorrer.
Por Jessica Rosales
Contrario a lo que se piensa de la mujer al ocupar puestos directivos, este grupo de la población puede contribuir de forma importante en el incremento de la productividad y, por lo tanto, de la ganancia económica.
La cultura laboral que existe no sólo en México, sino a nivel mundial, destaca que por la condición de género, el trabajo que se les asigna a las féminas es ineficiente y pone en riesgo a la empresa.
¿Por qué? Empezando desde la menstruación hasta el embarazo y las tareas en el hogar, para la mayoría resultan estas circunstancias un pretexto para no otorgarles puestos clave y de alta responsabilidad.
Un informe de McKinsey Global Institute (MGI) explica cómo el avance de la equidad de género puede agregar hasta 12 billones de dólares al crecimiento mundial (Forbes México, 23 de noviembre 2015).
En 46 de los 95 países analizados, el resultado señala que al mejorar la equidad de género en una región, esta podría aumentar el Producto Interno Bruto (PIB) anual en más de 10% para el año 2025 con respecto a 2014, con una mayor perspectiva de impulso regional, en especial en India y en América Latina.
A nivel mundial, las mujeres ocupan sólo el 4% de los puestos directivos; en México el porcentaje aparentemente aumentó a 28%, pero en la realidad la cifra se observa mucho menor.
Al año 2015, el 12% de los puestos en consejos de administración pertenecían a mujeres, y sólo 4% ocupan una posición de dirección o presidencia, revela un estudio de Deloitte.
Incluso en países reconocidos por sus políticas de equidad de género son pocas las mujeres en puestos de liderazgo.
Según la consultora Deloitte, Dinamarca presume de tener el sexto número más alto de mujeres en sus consejos, con 21.8%, pero la firma no identificó a una sola mujer presidenta.
En Noruega, el primer país en introducir cuotas de género en los consejos de administración, 36.7% de los asientos en consejos de administración está ocupado por mujeres y 18.2% son presidentas.
En el caso de México, las 31 empresas analizadas tienen mujeres ocupando sólo 6.2 por ciento de los puestos en consejos de administración y ninguna es presidenta. Actualmente no hay iniciativas nacionales para impulsar la presencia de las mujeres en los consejos o en posiciones administrativas de alto nivel, señala Deloitte.
De acuerdo con estadísticas del Instituto Nacional de la Mujer, en el año 2005 se reportaban 21 mil 867 puestos directivos en la administración pública frente a 62 mil 650 otorgados a los hombres en México.
En 2015 la cifra disminuyó a 18 mil 54 puestos directivos para mujeres y 62 mil 259 de hombres; sólo en 2010 y 2013 la mujer alcanzó una cifra de 30 mil, aunque esto seguía representando la mitad de cargos directivos que obtenía el hombre.
Aunque en México se observa un avance en las oportunidades para las mujeres, aún falta un largo trecho por recorrer. Mientras hombres y mujeres no crean que la integración de féminas en puestos clave y de dirección es rentable, las cosas permanecerán en el mismo camino.
Por eso la revista Forbes da algunos consejos para las mujeres que están entrando o ya están dentro de puestos directivos:
- Confianza y audacia son claves, ya que a menudo existen más recursos y oportunidades de los que se imagina.
- No dudes en realizar tus proyectos personales.
- Recuerda que no estás sola. No tengas miedo a pedir consejo.
- Determinación y compromiso laboral.
