Razones para ser feliz

Existen mil razones para ser feliz, aunque a veces no lo creamos.

Por Malena Monroy / Anspac

La felicidad se define como un estado de ánimo que supone satisfacción. Otros opinan que se logra cuando alcanzamos objetivos y superamos retos. Es una sensación de bienestar. Un sentimiento de autorrealización. Etimológicamente viene del latín felícitas, que quiere decir fértil.

Para Sigmund Freud la felicidad es inalcanzable, por las frustraciones del día a día, dice que lo máximo a que se puede aspirar es a una felicidad parcial. Para Aristóteles, la felicidad es cuando te encuentras en equilibrio y armonía. Para Epicuro, tenía que ver con la satisfacción de los placeres. Para las religiones teístas, la felicidad se encuentra en la paz, que se alcanza en la comunión con Dios. Los budistas por su parte la consiguen a través de la liberación del sufrimiento.

Para mí, la felicidad es cuando celebras todas las cosas, incluso las más sencillas y pequeñas y que hacen que esta vida valga la pena.

En alguna ocasión le preguntaron a dos albañiles que trabajaban en la construcción de una iglesia, qué estaban haciendo: uno contestó, con gran cansancio y aburrimiento, que estaba colocando tabiques y que parecía que nunca acabaría. El otro respondió, que estaba construyendo la catedral más bella que haya existido jamás. La diferencia es la actitud, uno encontraba en su quehacer un objetivo motivante. El otro no.

En un estudio realizado al cerebro humano se encontró que la felicidad es algo que se puede aprender, desarrollar, entrenar, mantener en forma y alcanzar. Es decir, que se tiene que trabajar en fortalecer los músculos mentales que nos hacen directamente responsables de nuestra felicidad. Entonces para ser felices, dependemos de los pensamientos que generemos.

     14,000 razones para ser feliz, es el libro escrito por Barbara Ann Kipfer, que ejemplifica más de 3,650 cosas que nos dan felicidad. ¿Te imaginaste que podría existir tal cantidad? A continuación, enlisto algunas:

  1. Ver películas clásicas
  2. Una taza de fruta fresca
  3. Ser despertado por un beso
  4. Ir de compras
  5. Leer un libro
  6. Una cómoda silla vieja
  7. Nuevas ideas
  8. Preparar una comida con la familia
  9. Lonches de jamón
  10. Esculturas de nieve
  11. Chistes “blancos”
  12. Una casa de muñecas
  13. Periódicos y café
  14. Pisar el césped descalzo
  15. Planear un viaje
  16. Hermosas fotos en una revista
  17. Chocolate caliente
  18. Cuartos con techos altos
  19. Niños dormidos en sus camas
  20. Los abuelos
  21. Un buen discurso
  22. Una chimenea
  23. Té de canela
  24. Dientes blancos
  25. Un mensaje de un amigo
  26. Una familia amorosa
  27. Una etapa nueva
  28. Agua caliente en manos frías
  29. Velas con aroma
  30. Practicar un deporte

Nada fuera de lo común. Depende de nuestra postura ante la vida. Entonces, ¿esperaremos a que la felicidad toque a nuestra puerta o saldremos a buscarla?

En un experimento realizado en la Universidad de Hertfordshire. Unos psicólogos reclutaron a un grupo de personas y las dividieron en aquellas que creían que eran afortunadas y las que creían que tenían mala suerte. A todas se les propuso la misma tarea: contar el número de fotografías que aparecía en un periódico. Quienes creían que tenían buena suerte terminaban en apenas unos segundos, mientras que quienes consideraban que eran desafortunados invertían mucho tiempo en terminar la tarea. La diferencia estaba en que las “personas afortunadas” veían inmediatamente un anuncio que decía: “deje de contar, el periódico tiene 43 fotografías”. Las “personas desafortunadas” no vieron este anuncio y contaron las fotografías hasta el final. Este experimento nos indica que la buena o la mala suerte también es una cuestión de actitud, de estar abiertos a las oportunidades. Esto vale también para la felicidad, abrirse a la oportunidad de ser feliz.

La felicidad puede ser provocada por diferentes cosas o situaciones, dependiendo del significado que cada persona les dé. Puede ser un estado duradero o pasajero. La realidad es que, la felicidad no debe ser una meta, sino un camino por recorrer. Y debemos trabajar por ser cada día un poco más felices, eso sí está en nuestras manos.

Alejandra Peart

Arquitecta y Licenciada en Letras Españolas con Maestría en Creación Literaria. Fundadora y Directora Editorial de Editorial Atemporia. Escribí el poemario En estas horas (Ed. Minimalia, 2004). Actualmente soy Directora de Contenido de la revista NES No Estás Sola, promotora cultural, editora, poeta, diseñadora editorial, feliz mamá de Rodri y esposa de Jorge. This is me.

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