¿Quién es Alilú?
Mi nombre es Alicia de Lourdes Aguirre Valdés, todo mundo me conoce como Alilú.
Nací en Saltillo, soy la única mujer y la mayor de 4 hermanos a los que quiero profundamente. Mis padres son Luis Manuel Aguirre Castro y Alicia Valdés de Aguirre a quienes amo, admiro y han sido un gran ejemplo y apoyo en mi vida. Soy una persona que valora mucho el tener una familia unida, alegre y que está conmigo en todo momento que los necesite.
Mis hijos Analicia y Jorge son mi inspiración y por los que lucho con amor para entregarme cada día a los retos que me presenta la vida y para dar lo mejor de mí. Ser madre es el mejor regalo que Dios me ha dado.
Tengo excelentes amigas que me alientan y apoyan, ellas han formado parte de mis logros pues siempre me han infundido el mensaje de que “sí se puede”, a ellas agradezco su cariño y amistad.
Soy una persona que ha pasado por grandes retos y decisiones que han cambiado el rumbo de mi vida, todo esto me ha servido para crecer como persona, en mi preparación como profesionista, emocionalmente y para estar más cerca de Dios.
¿Qué te hizo tomar la decisión de dedicar tu vida a la educación?
Desde pequeña siempre decía que iba a estudiar educación o para ser diseñadora. Estuve una temporada en Estados Unidos y cuando regresé, entré a estudiar diseño en Monterrey, en donde estuve un año. Sentí que no era lo que quería y decidí cambiar a educación. Siempre me han encantado los niños. Comencé a estudiar y trabajar al mismo tiempo, pues los horarios se prestaban para poder hacerlo. La institución y la directora donde trabajé durante 28 años fueron mi inspiración para incursionar en el camino de la educación. Inicié como maestra en kínder, posteriormente fui subdirectora y después, directora durante 20 años de un reconocido colegio de Saltillo. Después, tuve la grata experiencia de ser fundadora, así como directora de otro colegio de aquí de Saltillo durante casi tres años. Tengo 23 años de experiencia como directora, función que actualmente llevo a cargo en Harmony School desde agosto del presente año.
Tengo una carrera de 33 años en el ámbito educativo, lo cual me ha permitido tener cada día más pasión por la educación. Me emociona ver que algunos de los alumnos que tuve son ahora padres de familia y algunos de ellos padres de alumnos de Harmony School.
De los muchos métodos educativos que conoces ¿cuál crees que sea el que mejor se adapte a la sociedad de hoy en día?
A lo largo de mi carrera he tenido la oportunidad de trabajar en ambientes educativos bajo diversos enfoques pedagógicos, algunos de los cuales, aunque tuvieron vigencia en alguna época, considero que no son los que más se adaptan a las características de los niños en la actualidad. Estamos viviendo una época de grandes cambios tecnológicos, sociales, culturales, económicos, entre otros, que requieren que las escuelas vayamos cambiando a la par para lograr que los alumnos realmente salgan preparados para enfrentar los retos que estos cambios conllevan y los que se avecinan en el futuro. De acuerdo a mi experiencia y a diversas investigaciones en el ámbito educativo, uno de los enfoques que más facilita el desarrollo de competencias que los alumnos van a necesitar y que se ajusta a la manera en que los niños de hoy aprenden, es el constructivismo. Hay otros enfoques que también son muy efectivos y que se han mantenido vigentes a lo largo de los años como el método Montessori y Waldorf. En resumen, las escuelas con las mejores prácticas educativas trabajan basándose en una pedagogía, ya sea constructivista, Montessori, Waldorf, híbrida u otra, en donde el centro del proceso de enseñanza-aprendizaje es el alumno.
¿Cuáles son los retos que crees tú que enfrenta la educación en la actualidad?
Uno de los retos más importantes en la educación es el cambio de la educación tradicional hacia un nuevo modelo educativo en el que se desarrolle el potencial de la creatividad de los alumnos, que sean indagadores, que experimenten y descubran por sí mismos los aprendizajes que les interesan. De esta manera, los profesionales de la educación en la actualidad estamos en búsqueda de maneras en que podamos apoyarlos a desarrollar su autonomía e individualidad, sus talentos y habilidades que les permitan llegar a ser personas críticas, líderes, con capacidad para trabajar colectivamente y a usar la tecnología como una herramienta para aprender y crear.
Hoy en día, la educación debe ser incluyente, debe haber más cooperación entre la familia, escuela y la comunidad, ya que la educación no sólo es una responsabilidad de la escuela.
Otro reto es la formación de los maestros, ellos se deben prepararse para los nuevos cambios del futuro y para poder guiar al niño no sólo a aprender sino también a crecer emocionalmente y a formarse como ciudadanos capaces de adaptarse y a desenvolverse en todos los aspectos sociales.
¿Qué consejos le darías a las mamás para lograr ese equilibrio y sincronización entre lo que se enseña en casa y lo que se enseña en la escuela?
Yo pienso que todo lo que hacemos EDUCA, por ese motivo cuando deseamos que nuestros hijos tengan ciertos valores ellos aprenden más de lo que ven que lo que decimos. Siempre debemos ser coherentes con nuestras vidas porque nuestros hijos siempre están observando todo lo que hacemos. Debemos educar con la razón pero también con el corazón.
Muchas veces los colegios particulares centran su interés en inculcar valores en los alumnos y en ocasiones observamos que los padres y madres no actúan ni se comportan de la manera adecuada por ejemplo cuando no respetan la fila que se hace a la salida del colegio, cuando recibimos una llamada telefónica y le decimos a nuestro hijo que diga que no estamos. Nuestros hijos van a repetir y aprender todos estos comportamientos.
Mi consejo para las madres de familia es que vivamos en nuestros hogares en armonía, que les inculquemos a nuestros hijos los valores con nuestro ejemplo, a ser personas de bien, a formarlos con límites, a ser personas conscientes y humildes.
Los padres pueden enseñar a sus hijos el cómo aprender, el niño aprende de acuerdo a su propio ritmo y a través de sus intereses, enseñar al niño a cooperar en casa y a razonar en diferentes situaciones cotidianas. Crear en casa un ambiente socio moral y socio intelectual para que exista respeto, responsabilidad, aprendizajes y conocimientos.
¿Por qué el Harmony School? ¿Qué te hizo tomar la decisión de apostarle a esta nueva institución?
Desde hace más de un año se presentó la oportunidad de participar en el proyecto educativo Harmony School, del cual soy fundadora, socia y directora. En este andar de la educación coincidimos tres familias con una visión en común: hacer un cambio en la sociedad de Saltillo a través de una educación integral y sólida mediante la cual los niños puedan seguir curiosos por aprender, formándose como personas libres, emprendedoras, emocionalmente inteligentes y con espíritu de servicio para ayudar de manera desinteresada a los demás. Buscamos el desarrollo de sus habilidades y talentos para que puedan formarse como personas preparadas para enfrentar el futuro que les espera y conscientes de su papel como ciudadanos responsables de cuidar nuestro país y nuestro planeta.
Harmony School es el sueño que siempre tuve. Le apostamos a que Saltillo estaba preparado para tener un cambio en la educación y hoy nos damos cuenta de que los padres de familia realmente estaban listos para formar a sus hijos bajo una educación diferente.
Y ¿cómo te ves tú en el futuro? ¿Cuáles son tus planes?
Mis planes futuros más a corto plazo son el estar más tiempo con mi familia, seguir creciendo como profesionista, como persona y espiritualmente, así como hacer crecer a Harmony School hasta el nivel de secundaria. Mis planes profesionales están motivados por mi deseo de mantenerme a la vanguardia como profesionista y continuar realizando proyectos, como Harmony School, que impacten la vida de otras personas y contribuyan a mejorar la educación en México.
¡Gracias!
Artículo tomado de la versión impresa de la revista.
