HIJO DE MI CORAZÓN

Por Mary Carmen Urrieta

Qué bella coincidencia, publicar en días cercanos al 10 de mayo.

En este año en el que el Día de la Madre tiene un significado muy importante en mi vida, una plática que tuve con mi querida editora me llevó a un tema sentido e importante: la adopción, los hijos del corazón.

Vienen a mi mente 3 de las muchas cintas que tratan este tema, polémico para muchos, esperanzador para casi todos, aquí les hablo de una tercia de historias.

UN SUEÑO POSIBLE
(The Blind Side) 2009
Dirección: John Lee Hancock

La historia de esta cinta es sencilla, poderosa y de la vida real.
Una mujer de clase acomodada de Estados Unidos adopta a un joven, que vivía sin hogar. Es con el apoyo, cariño y confianza de su nueva familia, que el tímido muchacho de casi 2 metros de estatura, se convierte no solo en un hombre de bien, también es electo en el draft de la NFL y más tarde llega a ser un exitoso jugador de los Cuervos de Baltimore.

Los temores de una madre cuarentona al incluir en su familia a un joven que sufrió toda clase de privaciones, desaparecen cuando se asoma al corazón no solo de su nuevo hijo, también al de sus hijos menores y su marido, quienes la apoyan y arman juntos un proyecto de familia en el se imponen la confianza, el amor y la apuesta por una segunda oportunidad.

Esta película no solo conquistó a muchos espectadores, seguramente sacó a la luz un tema delicado, la adopción de jóvenes. No, no son esos tiernos bebés recién nacidos, son personas que seguramente han visto pasar su vida entre la ilusión y la desesperanza de un futuro que no llega, eso debe dejar una huella profunda en ellos, algo que solo borran el amor y la confianza, que vemos reflejados en la película que protagoniza Sandra Bullock.

INTELIGENCIA ARTIFICIAL
(A. I. Artificial Intelligence) 2001
Director: Steven Spielberg

En un futuro no muy lejano en el que la ciencia y la tecnología logran cosas insospechadas, las familias pueden elegir el color de piel, de ojos, estatura y tono de voz de sus hijos, pues se trata de robots.

Una idea que se le ocurrió a Stanley Kubrick, pero no pudo filmar, pues lo alcanzó la muerte y que materializó Steven Spielberg presentan la posibilidad de darle a los robots características de un ser humano.

Pero ¿Qué pasa cuando David, el niño androide que protagoniza la cinta, se acerca mucho a ser un niño real gracias, en gran parte al profundo amor con el que su mamá humana lo anhela?

Para muchos es una cinta un poco desangelada, para otra parte de espectadores, los que tenemos un corazoncito de pollito, es una bella canción, como muchas del cine internacional, a la maternidad, a la esperanza de volver a ver a un hijo que se fue, una historia de amor que se queda por mucho en la mente de quienes la ven con ojos de mamá.

Además, muchos críticos, (que no siempre tienen corazoncito de pollo) consideran un acierto esta cinta que puede ser un Pinocho del futuro. Indispensable verla con una caja de Kleenex y con la mente abierta.

UN LARGO CAMINO A CASA
(Lion) 2016
Director: Garth Davis

Un día Saroo, un niño indio de 5 años, sale con su hermano Guddu y entre los brincos de un pequeño de su edad se sube a un tren estacionado y se queda dormido.

Al despertar, cientos de kilómetros lejos de su hogar, el pequeño se encuentra perdido, sin conocer el idioma del lugar al que lo llevó el tren y sin modo de identificarse y volver a casa.

Ahora, refugiado en un orfanato y con mil cosas que decir, pero sin poderlas traducir, es adoptado por una familia australiana que con mucho amor, lo recibe en su nuevo hogar.

Con el paso de los años, Saroo recuerda que su familia no lo abandonó, que se perdió y que quiere regresar con los suyos.

El gran amor de sus padres alcanza para llevarlo de vuelta a la India, pues guiado por su corazón, buscará a los suyos.

Otra historia real que deja en claro el profundo amor de los padres adoptivos de este hombre que quiere saber sus orígenes, para poder honrar a sus dos familias.

Mary Carmen Urrieta

Soy comunicóloga de profesión, géminis al 100% y cinéfila de corazón. Tengo 20 años de experiencia en edición periodística y a mi paso por diferentes diarios de Saltillo y uno en Guadalajara, aprendí la magia que despierta la palabra escrita en todos los que nos dejamos enamorar por ella. Hace muuucho tiempo, para celebrar mi cumpleaños número 4 le pedí a mis papás que no me hicieran fiesta, pues además de que no me gustaba el pastel, me sentía más contenta en una sala de cine. Con el paso del tiempo, solo una cosa ha cambiado, ya amo los pasteles. Mi amor por el cine no solo creció y me llevó a prepararme y escribir sobre lo que veo, también me ha regalado increíbles experiencias que comparto con quienes me leen.

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