Tigers

Por Clara F. Zapata Tarrés

El pequeño detalle

Algunas y algunos alucinarán. Cuántas veces he escuchado, ¿Qué tiene dar fórmula? ¿Yo estoy bien, no me pasó nada, tengo salud? ¡Qué exagerada es la gente! Qué tiene que te patrocine una marca de fórmula para conseguir fondos? No hay de otra, así nunca progresarás como asesora de lactancia o como organización…

Sin duda, a primera vista, todo se ve en calma porque miramos desde afuera, sin meternos en camisa de once varas, como dice el dicho.

Nos llaman exageradas, teta fanáticas, chichi empoderadas, madres locas… Algunos y algunas… Así y más apodos que al final nos identifican y que con gracia acabamos teniendo como bandera: #chichipower #chichicamino #chichibestie y más!

Y estoy en casa, tomando clases con mis hijas y al abrir youtube para ver un video de fracciones matemáticas, PUM! No falta el anuncio de algún producto alimenticio de bebés, niños y niñas: fórmulas, papillas, circulitos de colores y otros tantos siempre SIEMPRE acompañados de ositos, pajaritos, ternura, genialidad y muchos etcéteras. No falta que en mi feed aparezcan capacitaciones de lactancia brindadas por médicos de algún Instituto de Ciencias de tal o tal compañía (¿¿¿¿Compañías de fórmula capacitando sobre lactancia????).

Y seguramente tú, que tienes quizás un bebé, estás viendo pepa o pawpatrol o otra caricatura, también te sale algún comercial de alimentos infantiles que no necesariamente te gustaría que tu bebé consumiera y que poco a poco le entra por los ojos y luego van al super y se encuentra con la misma imagen y lo quiere en ese mismo instante después de hacer la pataleta de su vida… Y nosotras también nos volvemos cautivas. El biberón más caro, que cambia de color al calentarlo, la fórmula que te promete arreglar problemas intestinales o alérgicos, que te promete también a través de videos de niños en patineta que tu hija o hijo serán atletas y podrán brincar escaleras cual profesional de parcour.

¿Sabías que ahora los biberones de moda son de aluminio? ¿Sabías que puedes adquirir un chupón o un biberón de Karl Lagerfel o de Hugo Boss? Un biberón está en aproximadamente 2,000 pesos mexicanos. Barato para ser de estas marcas. En las farmacias, un biberón puede costar 20.00 pesos pero generalmente nos gusta la moda hasta en esto… Así también las fórmulas lácteas. Las hay de 100.00 (las había regaladas) o las hay de 700.00. De vaca, de cabra y hoy, orgánicas, porqué no? ¿Sabías que las ventas de fórmulas están estimadas en 70 MILLONES de dólares?

El problema no es la decisión. Cada quien decide lo que mejor le queda o lo que alcanza a ver. Pero no hay ninguna duda de que la publicidad nos hace comprar hasta lo que dijimos que nunca compraríamos. Si no, no habría berrinches en las cajas de los supermercados o no tendríamos cremas y shampoos de cientos de pesos en nuestras repisas del baño.

Las chichifanáticas no estamos en contra de las fórmulas. Sin duda, hay bebés que las necesitan y madres con algunos padecimientos que necesitan darlas. Son las y los menos.

El problema es la publicidad engañosa, como ya les platicaba…

Tigers

Este fin de semana vi un documental de un personaje que se convierte en vendedor de fórmulas. Y ahí está, en su humilde casa de cuatro paredes, con dos bebés que mantener y su mujer mirándolo enamorada pero bastante desesperada porque no consiguen vivir del trabajo de vendedor de productos médicos. Decide acudir a una reunión informativa donde literalmente el capacitador RUGE como un tigre pretendiendo convertir a todos esos esperanzados en tigres de ventas. Luego, los hace rugir… Plata, cobre, oro y diamante… Al personaje le dan maletas repletas de dulces y chocolates para entregar en su vecindario, luego en cada enfermera y médico del hospital de su localidad. Al recibirlos tienen desconfianza, sin embargo, pasan las semanas y aman cada vez que este vendedor se les aparece… Y así un día, llega con una lata de fórmula de regalo, mencionando tooodas las bondades y milagros… Va convenciendo a cada uno en los pasillos, los consultorios, las cenas de gala a la que lo invitan, hasta que cada uno de los médicos administran y recetan a sus pacientes. En el camino andado, le regalan una moto, viajes y poco a poco se va transformando en un tigre más salvaje en lo que a ventas se refiere.

Un día, el primer médico con el que habló, le menciona que hay algunas (bastantes) irregularidades en la terapia intensiva. Bebés enfermos de diarrea, desnutridos y madres desesperadas. Enojado, el médico, le dice al TIGRE que vaya a una zona de la ciudad muy pobre. Camina, despacio, mirando a todos los niños y niñas con mocos, con panzas famélicas y de pronto, una madre en cunclillas, llenando un biberón con agua no potable… poniendo poco polvo y más líquido… Esto es en Paquistán. La película se llama precisamente TIGERS (Dirigida por Danis Tanovic, 2014).

México

México no es la excepción. Hace poco tiempo hubo una gran campaña del gobierno junto con una de las empresas más poderosas de refrescos. En lugar de promover la alimentación saludable, se llevaba a cada rincón del país mucha comida chatarra. Ya sabemos que esos camioncitos llegan a cualquier lugar. Durante los terremotos, seguramente te has topado o tú misma has donado una o varias latas de fórmula. Este gran gesto de generosidad resulta ser más maquivélico de lo que pensamos. Las compañías de fórmulas también aprovechan estos momentos de emergencias para donar sus productos. Y así, donan esa vez y tú también. Pero el meollo del asunto es que ese bebé, esa mamá, esa familia necesitaría que le donaras por lo menos durante un año más… ¿De dónde sacaría el dinero para comprar la fórmula? Y esa mamá que alguna vez escuchó que en momentos de miedo o estrés “se te va la leche”, ¿se ilusionará con una lata?

Necesitamos tener cuidado, mirar más allá, encontrarle la quinta pata al gato y decidir informadas, sin llenarnos de sonrisas al mirar un anuncio dónde nos pintan juzgadas y enojadas unas con otras por haber tomado ciertas decisiones sobre la lactancia. Necesitamos mirar más allá de nuestras narices y saber que las que luchamos, defendemos y promovemos la lactancia lo hacemos desde una trinchera que intenta retomar la equidad como bandera y que reconoce el privilegio, deshaciéndose de él para replantear el horizonte.

Más información:

http://www.babymilkaction.org/archives/1931

https://www.facebook.com/OfficialTigersTheMovie

Clara Zapata

Soy Clara, etnóloga chilena-mexicana. Tengo dos hermosas hijas, Rebeca y María José, con Joel, mi regiomontano amado. La libertad y la justicia son mi motor. Creo plenamente en que la maternidad a través de la lactancia puede crear un mundo más pacífico y equitativo y por eso acompaño a familias que han decidido amamantar. Amo la escritura, la cultura y la educación.

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